- La BIA está dirigida a los hispanoshablantes de todo el continente americano. Ante todo, a discípulos misioneros que cuenten ya con cierta formación cultural y religiosa, presente o no un servicio pastoral en sus comunidades: desde los diversos agentes de pastoral hasta los lectores de cultura y conocimientos medios que buscan profundizar su familiaridad con Dios y que, atentos a los signos de los tiempos, disciernen su compromiso con la historia y su servicio al mundo.
- No obstante, la traducción es también para todos los cristianos, incluso los alejados de la Iglesia.
- No hay que ser un especialista para leer y entender la BIA. Se ha procurado un cuidado nivel literario y teológico, que las introducciones y el glosario asuman los avances de las ciencias bíblicas y que las notas a cada pasaje ofrezcan la interpretación, del mismo modo que ayuden a orar, animen el servicio pastoral encomendado y el compromiso evangélico.
UNA BIBLIA EN ESPAÑOL
La iniciativa surge de la Conferencia Episcopal de los Estados Unidos (USCCB) para los inmigrantes hispanohablantes. Los obispos estadounidenses querían una Biblia en español para los inmigrantes hispanos, que luego pudiera servir también, con las adecuaciones necesarias, para los leccionarios litúrgicos.
UN ENCARGO DE LA USCCB AL CELAM
La USCCB le pide al CELAM (Consejo Episcopal Latinoamericano) que se encargue de realizar esta Biblia, comprometiéndose los obispos estadounidenses a financiar el proyecto durante 10 años.
UN PROYECTO PARA LATINOAMÉRICA Y EL CARIBE
Consultados los presidentes de la distintas Conferencias Episcopales, el CELAM confirma la utilidad de asumir el proyecto como un servicio también para Latinoamérica y el Caribe.
UN GRUPO DE TRABAJO AL SERVICIO DE LA TRADUCCIÓN
En 2003, el CELAM crea el CEBIPAL (Centro Bíblico Pastoral para América Latina, hoy CEBITEPAL), y una de las tareas que se le encarga es la traducción de esta Biblia. En 2004 se constituye un grupo de trabajo específico, que inicia la tarea en 2005 y concluirá en diciembre de 2015.